El rojo de tu sangre y mis demonios se mezclaron

Es una historia que anda hace un tiempo creandose en mi cabeza, y necesito escribirla antes de perderme en ella.

2.25 am

Oscuridad. Un espejo de cuerpo entero. Una vela. Un joven de 22 años.

Chorreaba un poco de sangre por su boca semi abierta; Javier se miraba en el espejo, alumbrado solo por una vela que reposaba en el escritorio de al lado. La navaja, con la que habia cortado -superficialmente- su lengua, la sostenia aún en la mano derecha. Sonrió, de la sublime manera con la que derretía a muchas chicas.

Se pasó los dedos entre el cabello, estaba sudando, se sentía drogado-no habia consumido nada-. El teléfono sonaba a lo lejos, su celular también. Tomó un vaso con agua y se sentó en la cama, tiró la navaja en el escritorio. Prendió un cigarro y se asomó a la ventana. Vivía en el 5to piso, en un edificio donde pocas veces habia calma. Abajo, la avenida, tenia el mismo ensordecedor sonido que le hacía palpitar las venas de la cien. De pronto...recuerdos de su infancia se colaron en su cabeza.

"Saca la lengua...lamelo...esto es placer muchacho...abre tu boca...no llores carajo! no seas maricón! ahhh...huevón...ya te dije, si no colaboras mataré a tu madre...eso es...esta dura...durita por ti!...vamós!! ahhh....bien..."

-AHH!! MALDITO HIJO DE PUTA!! TODO ES TU CULPA CARAJO...mierda...si tan solo me hubieses creído a mí, madre...no a ese maldito violador....hipócrita...AHHH!!!-golpeó la pared y lloró, lloró como un niño...

Javier habia terminado ciencias de la comunicacíon, en una universidad privada -pagada por su padríno, Marcos, quién era el mejor amigo de su padre...cuando este falleció, Marcos asumió por cuenta propia los gastos de Javier-.

Era un chico con notas sobresalientes, hablador, gay, pero no afeminado. Detallista, persuasivo, simpático, arrogante con las mujeres, con un excelente cuerpo, personalidad fría, siempre tenía unos ojos brillantes...que ardian al reposar en ti.

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Me desperté con el sonido del celular: -ehm...alo?-conteste...aun medio dormido.

-Huebon! donde mierda estas? te he llamado un pincho d vces anoche! en la madrugada incluso fui a tu depa y nadie me abrio la puerta, en q mierda estas metido ahora?

-q?...puta, que hora es?

-son las 8.30...- me contestó rafael, con un tono mas comprensivo.

-carajo...estoy kagado...no voy a poder ir hoy, entrare a bañarme y nos vemos a la hora de almuerzo en el malecón, te parece?...no me siento nada bien.-respondi mientras me paraba de la cama -aun no recuerdo como llegue alli-

(continuara)